L1 - El tutor de prácticas como líder pedagógico: la importancia de la experiencia
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Los centros educativos son organizaciones que aprenden Gairín (2000). Así, dentro del Grupo de Innovación Docente (GID2016-41) de la UNED entendemos el liderazgo docente como “el proceso mediante el cual los profesores individual o colectivamente, influyen en sus colegas, directores y otros miembros de las comunidades escolares para mejorar las prácticas de enseñanza y aprendizaje con el objetivo de aumentar el aprendizaje y el rendimiento de los alumnos” (York-Barr & Duke, 2004, p.288), es por ello que los educadores, tutores, profesorado de todos los niveles educativos deben estar bien formados para lograr un liderazgo equilibrado y colaborativo.
En este sentido, la clave para liderar pedagógicamente y con éxito una organización educativa habrá que buscarla en la exigencia de una comprensión global de los fenómenos que en ella se dan y, posteriormente, en el desarrollo de estrategias adecuadas para distribuir el liderazgo entre diferentes personas con la finalidad de conseguir una mejora del aprendizaje. (Miras y Longás, 2020, p.295) Con esta premisa, “el ejercicio del liderazgo ayuda a que todos los miembros de la comunidad estén suficientemente comprometidos con la misión y el proyecto de la institución.” (Hernández et al., 2017, p.511).
Desde la UNED y con la experiencia del trabajo realizado en las asignaturas de Prácticas de la Facultad de Educación, es lógico que se facilite la formación en competencias de liderazgo y gestión a los tutores que, posteriormente, transmitirán su conocimiento a otros. La influencia en los compañeros de organización se ejercerá a través de la persuasión y del ejemplo profesional, no mediante la obediencia ciega y el conformismo pasivo.
Se hace referencia al líder que es capaz de influir en la comunidad socioeducativa del centro, lo que “significa adicionalmente que el liderazgo es fluido, en el sentido de que quienes son líderes y están en la posición de influir, también pueden en otro momento ser sujetos de influencia” (Horn y Marfán, 2010, p.84). Si se presta la suficiente atención a las buenas prácticas implementadas por los profesionales con experiencia, se conseguirá una adecuada transformación de los procesos de gestión en los centros educativos si atendemos a Hallinger & Heck (2011).
En esta comunicación se presenta un análisis descriptivo de la propuesta formativa y de mentorización entre iguales del grupo de profesorado tutor de la UNED en las titulaciones de la Facultad de Educación.
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Begoña Mora Jaureguialde Universidad de Huelva
