Infancia, adolescencia y juventud en dificultad social por su ámbito familiar

Fecha: 30 ene 2025
Visto: 1 vez

La violencia en la vida familiar es el resultado de una inapropiada convivencia que daña a todos los miembros de la familia, pero de manera especial a los niños, adolescentes y jóvenes que se encuentran atrapados en ella. El principal perjuicio de la violencia familiar sobre los niños es que les impide desarrollar su recorrido vital en un entorno familiar seguro y estable. La sociedad civil es consciente de la situación de estos menores, por lo que arbitra medidas que velen por sus derechos y seguridad. En España, la Constitución recoge la obligación parental hacia los menores y manifiesta que, en caso de incumplimiento familiar, el menor no quedará desamparado. La Convención sobre los Derechos del Niño promulgada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 44/25 de 20 de noviembre de 1989 sigue la misma filosofía y adquiere los mismos compromisos. Desde un punto de vista legislativo, el niño y el adolescente están protegidos a través de la acción de los Servicios Sociales cuando su situación vital alcanza niveles de riesgo social moderado, intenso o de exclusión social. En los casos de dificultad social, es decir, riesgo social leve, la actuación de los Servicios Sociales no es tan inmediata. Es así que muchos niños, adolescentes y jóvenes se encuentren en una situación de dificultad social por vivir largo tiempo en un ámbito familiar dañino, ya sea por violencia intrafamiliar entre sus miembros, por incompetencia familiar, por abandono afectivo, activo o pasivo, o por maltrato psicosocial.

Licencia: Copyright (Licencia propietaria)
  • Francisco José del Pozo Serrano Profesor titular del departamento de Teoría de la Educación y Pedagogía Social. Facultad de Educación, UNED
  • Francisco Fernández-Cueto López realizador UNED Media